La gonoartrosis es una patología que afecta la articulación de la rodilla y se caracteriza por el desgaste progresivo del cartílago articular que recubre las superficies articulares, lo que provoca dolor, rigidez y limitación de movimientos en la articulación. Esta condición puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes, limitando su capacidad de movimiento y afectando su autonomía en actividades diarias. (Chanllio Lavarello, 2021)
Definición de la gonoartrosis
La gonoartrosis, también conocida como artrosis de rodilla, es una enfermedad articular degenerativa que se caracteriza por el desgaste del cartílago en las articulaciones de la rodilla. Este desgaste provoca dolor, inflamación, rigidez y limitación de movimientos en la articulación afectada. A medida que avanza la enfermedad, los huesos pueden rozar entre sí, lo que agrava los síntomas y puede llevar a la deformidad de la articulación. (Mollinedo Quezada & Ocheita Cóbar, 2023) (Munive)
Epidemiología de la enfermedad
La gonoartrosis es una de las principales causas de discapacidad en la población adulta a nivel mundial. Se estima que afecta a un porcentaje significativo de la población mayor de 60 años, siendo más frecuente en mujeres que en hombres. Incluso la OMS en 2019 habla que 528 millones de personas padecen de artrosis, siendo la rodilla la articulación más afectada.
Otro estudio muestra que el 30% de la población de 65 años imágenes radiológicas compatibles con artrosis de rodilla, siendo sintomática un tercio de ellos. La prevalencia varía mucho según los criterios de inclusión y la metodología.
Además, diversos factores de riesgo como la obesidad, la edad avanzada, lesiones previas en la articulación y la carga excesiva sobre la rodilla, pueden aumentar la probabilidad de desarrollar esta enfermedad. La gonoartrosis tiene un impacto negativo en la calidad de vida de los afectados y representa una carga importante para los sistemas de salud. (Bazan Gallo, 2021) (Cifuentes Rosero, 2023)
Diagnóstico
El diagnóstico de la gonoartrosis se basa en la evaluación clínica y en la sintomatología característica que presenta el paciente. Además, se requiere realizar una serie de exámenes de estudio para confirmar el diagnóstico.
Cuadro clínico de la gonoartrosis
El cuadro clínico de la gonoartrosis se caracteriza por la presencia de dolor en la rodilla, que empeora con la actividad física y se alivia con el reposo. Los pacientes suelen presentar rigidez articular, especialmente después de periodos de inactividad, como levantarse por la mañana o estar sentado durante mucho tiempo. Además, pueden experimentar inflamación en la articulación, lo que se manifiesta por hinchazón y calor localizados.
En algunos casos, puede haber deformidades en la articulación afectada, como la presencia de osteofitos o derrame articular.
Exámenes de estudio para el diagnóstico
Para el diagnóstico de la gonoartrosis, se pueden realizar diversos exámenes de estudio. Las radiografías son una herramienta fundamental, ya que permiten evaluar la estructura de la articulación y detectar los signos característicos de la enfermedad, como el estrechamiento del espacio articular y la presencia de osteofitos (Cachitos óseos).
Además de las radiografías, existen otros exámenes de estudio que pueden ser útiles para el diagnóstico de la gonoartrosis. Uno de ellos es la resonancia magnética, que proporciona imágenes detalladas de los tejidos blandos alrededor de la articulación, lo que permite evaluar el grado de inflamación y detectar lesiones adicionales.
Ecografía
Otro examen de estudio útil para el diagnóstico de la gonoartrosis en la consulta médica, es la ecografía, la cual puede mostrar la presencia de derrame articular y evaluar el estado de los tejidos blandos de la articulación. Esta técnica ve en tiempo real, lo que permite detectar cambios en la estructura y función de la articulación afectada. Hoy en día se considera como parte del examen físico.
Artrocentesis o punción articular
La artrocentesis o punción articular también es un examen de estudio utilizado en el diagnóstico de la gonoartrosis, ya que permite obtener una muestra del líquido sinovial para analizarlo y determinar si existe inflamación o infección en la articulación.
Este procedimiento consiste en insertar una aguja en la articulación y extraer una pequeña cantidad de líquido sinovial para su posterior análisis en el laboratorio. El análisis del líquido sinovial obtenido mediante artrocentesis puede ayudar a descartar otras posibles causas de los síntomas del paciente y confirmar el diagnóstico de gonoartrosis.
Entre las características que se pueden evaluar en el análisis del líquido sinovial se encuentran la presencia de cristales de ácido úrico, que pueden indicar la presencia de gota, y la presencia de bacterias, que pueden indicar una infección en la articulación (artritis séptica).
Tratamiento
El tratamiento de la gonoartrosis busca aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente. Para ello, se pueden emplear diferentes enfoques. En primer lugar, el tratamiento farmacológico juega un papel fundamental en el alivio del dolor y la reducción de la inflamación.
Tratamiento farmacológico de la gonoartrosis
El tratamiento farmacológico de la gonoartrosis se basa en medicamentos que ayudan a controlar los síntomas y reducir la inflamación en la articulación afectada. Los analgésicos son utilizados para aliviar el dolor como el paracetamol o incluso los opioides débiles, y los antiinflamatorios no esteroidales AINES tienen un efecto analgésico y antiinflamatorio. Estos últimos pueden ser administrados por vía oral o tópica.
Tratamiento en casos más severos
En casos más severos, se pueden aplicar corticosteroides directamente en la articulación para aliviar el dolor y la inflamación. Estos se van usando cada vez menos dado los efectos secundarios como adelgazamiento de la piel y deterioro del cartílago articular. En su lugar, se está utilizando cada vez más la viscosuplementación, que consiste en la inyección de ácido hialurónico en la articulación para mejorar la lubricación y reducir la fricción Y el plasma rico en plaquetas que disminuye la inflamación y promueve la reparación.
Es importante destacar que estos tratamientos pueden no ser efectivos en todos los casos, y en algunos pacientes puede ser necesario recurrir a opciones más invasivas, como la cirugía artroscópica o la artroplastia de rodilla. Es fundamental evaluar cada caso de manera individual y seleccionar el tratamiento más adecuado para cada paciente, teniendo en cuenta la gravedad de la gonoartrosis y las características específicas de cada persona.
Tratamiento no farmacológico recomendado
Además del tratamiento farmacológico, existen medidas no farmacológicas recomendadas para el manejo de la gonoartrosis. En primer lugar, la pérdida de peso en caso de obesidad es fundamental para reducir la carga sobre la articulación afectada y aliviar los síntomas.
La fisioterapia desempeña un papel importante en el fortalecimiento de los músculos periarticulares, lo que puede mejorar la movilidad y disminuir el dolor. La terapia física puede incluir ejercicios de fortalecimiento, movilización articular y técnicas de terapia manual.
En ocasiones se indican dispositivos ortopédicos como rodilleras para optimizar la cinestesia de la articulación y reducir el impacto sobre la articulación y bastones para disminuir la carga sobre la articulación afectada. Recordar que el bastón se usa en el lado contralateral. (Martínez-Barro et al.2023)(Chafla Quishpi, 2023) (Mollinedo Quezada & Ocheita Cóbar, 2023)
Posibilidad de realizar procedimientos bajo guía ecográfica
En algunos casos, es posible realizar procedimientos para el tratamiento de la gonoartrosis bajo guía ecográfica. Esto permite una mejor visualización de la articulación y una mayor precisión en la administración de medicamentos o sustancias viscosuplementadoras.
La infiltración de sustancias viscosuplementadoras, como el ácido hialurónico, y el plasma rico en plaquetas PRP pueden mejorar los síntomas y retardar el deterioro articular. Junto con los procedimientos intra articulares se pueden hacer bloqueos regionales de los nervios que le dan sensibilidad a la articulación de la rodilla; tales como los nervios geniculados, safeno, del vasto medial y los popliteos mediante el bloqueo IPACK, lo cual ayuda a disminuir el dolor en la zona.
En los mismos nervios nombrados se pueden hacer también ablación mediante radiofrecuencia. Estos procedimientos bajo guía ecográfica son mínimamente invasivos y pueden proporcionar alivio a los síntomas de la gonoartrosis, mejorando la función y calidad de vida de los pacientes. (Amaya Durán)(Santana Pineda, 2020)(Mollinedo Quezada & Ocheita Cóbar, 2023)
Tratamiento quirúrgico
El tratamiento definitivo de la gonartrosis es el recambio protésico de la articulación. Este es un dispositivo diseñada para restaurar la función articular reemplazando la superficie articular. Sin embargo, este es un procedimiento mayor y requiere un cuidadoso proceso de evaluación preoperatoria y rehabilitación postoperatoria.
Pronóstico
El pronóstico de la gonoartrosis varía según la gravedad de la enfermedad y la edad del paciente. En general, la gonoartrosis tiende a empeorar gradualmente con el tiempo, lo que puede provocar un deterioro progresivo de la función articular y limitaciones en la movilidad. Sin embargo, el pronóstico individual también depende de otros factores, como el tratamiento recibido, la adherencia del paciente al plan de tratamiento y la presencia de comorbilidades. Es importante que cada paciente sea evaluado de manera individual para determinar su pronóstico específico y adaptar el tratamiento en consecuencia.
Resumen
El manejo se basa en disminuir el dolor, para ello la medida de mayor impacto es disminuir la carga mediante la baja de peso y el uso de analgésicos orales como también de procedimientos intra articulares o bloqueo de nervio que le dan sensibilidad a la rodilla. Se requiere un proceso de rehabilitación para fortalecer la musculatura. El tratamiento definitivo es el recambio protésico, que es una cirugía mayor y requiere un intenso proceso de rehabilitación.
Es importante que el paciente siga las indicaciones del médico, realice los cambios necesarios en su estilo de vida y reciba el tratamiento adecuado para controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida a largo plazo. (Cantillano-Merlo et al.2023)(Velázquez Vázquez, 2023)
Dr. Smiljan Astudillo
Fisiatra especialista en rehabilitación y manejo del dolor